Pinkwashing: una mala estrategia de marketing y publicidad.

El Pinkwashing sólo vulnera a las personas LGBTTTIQ+, a su movimiento, sus derechos y su identidad, por lo que debes evitar a toda costa su practica.

Hoy en día, vemos publicidad en todos lados de todo lo que te puedas imaginar, productos, servicios, incluso la imagen personal que cada uno presenta al mundo, y en muchas de estas ocasiones esta publicidad suele ser acompañada de personalidades famosas, conceptos y demás estrategias solo para hacerla llamativa o para que cierto tipo de gente la voltee a ver y compre lo que vendes, o para que crean que eres o piensas de cierta manera.

Aunado a esto, viene un gran problema y es cuando una marca o empresa cruza la delgada línea entre el apoyar un movimiento social, tales como el feminismo, Black Lives Matter, las comunidades indígenas, la comunidad LGBTTTIQ+ (lesbianas, gays, bisexuales, transexuales, transgénero, travesti, intersexual, queer) entre muchas otras, y lucrar con ellas, como una especie de lavado de dinero a costa de aprovecharse de su movimiento y lucha social, en donde más allá de apoyar, sumar y crear conciencia sobre la importancia de estos movimientos, la mayor motivación de estas empresas es generar ingresos en base a aprovecharse de las personas que sufren y viven este tipo de realidades. Son a este tipo de acciones a las que llamamos “Social Washing”, y una vez comprendido lo anterior, es hora de enfocarnos en un tipo de Social Washing denominado «Pinkwashing«.

¿Qué es el Pinkwashing?

En español significa «Lavado Rosa», y es definido por El Centro de Información Sobre Empresas y Derechos Humanos de la siguiente forma: “Cuando una empresa solamente está interesada en hacer dinero a costa de la comunidad LGBTTTIQ+. Por ejemplo, cuando nos venden frases estampadas en playeras que pretenden rescatar el argot gay, o cuando llenan de glitter cualquier producto, incluso la comida.”

Por lo general, estas empresas sólo se ponen la bandera del arcoíris en el mes del Pride, pero el resto del año son ajenos a esta causa social y movimiento; discriminan a personas de la comunidad dentro de su lugar de trabajo y no les brindan el apoyo y la seguridad que cualquier otro de sus trabajadores pueda tener al no formar parte de esta; sus acciones son sólo de dientes para afuera.

Entonces ¿una empresa o marca no puede mostrar su apoyo a la comunidad LGBTTTIQ+?

Claro que se puede, de hecho, hay varias maneras correctas de realizar este tipo de campañas de forma adecuada y sincera, como, por ejemplo, antes que nada, asegurarte que tu empresa es un lugar seguro para tus trabajadores que forman parte de la comunidad LGBTTTIQ+, que se sientan a salvo trabajando para tu marca y siendo miembros de esta comunidad, a salvo de no ser discriminados por nadie dentro de tu empresa, de no ser despedidos solo por ser parte del colectivo.

Otras acciones a tomar son: si vas a promover y apoyar a la comunidad LGBTTTIQ+ no lo debes de hacer solamente una vez al año en el mes del Pride, si no que debe ser TODO el año puesto que las personas no son LGBTTTTIQ+ un mes al año o una semana o un día, lo son todo el año y luchan en contra de la discriminación y la violencia ejercidas contra ellos las 24 horas del día los 7 días de la semana, por lo que, apoyar solo cuando quieres que ellos te compren es una mala práctica.

Si vas a realizar este tipo de publicidad en pro de la comunidad LGBTTTIQ+ lo mas adecuado es que las personas dentro de tu empresa que la realicen y estén a cargo de la campaña sean de hecho personas de esta comunidad, que saben cuales son las necesidades de la misma, como abordar el tema, que se debe recordar al mundo sobre el movimiento y como poder apoyar, ya que, al ser parte de esta, ellos mismos entienden todo lo que conlleva ser LGBTTTIQ+.

Otras acciones pueden ser que las ganancias de tus productos edición especial del Pride sean donadas a asociaciones civiles que apoyen, ayuden y luchen por la comunidad, que tú participes de forma activa como marca o empresa en la lucha para combatir la LGBTfobia, así como también afrontes y señales casos de discriminación dentro y fuera de tu empresa, otra acción, es revisar y estar conscientes de que tu publicidad no maltrate, violente, vulnere ni ridiculice a las personas LGBTTTIQ+ así como sus derechos y libertad que tanto trabajo ha costado conseguir siendo que ya deberían de venir por sentado como los del resto de la población que no forman parte de esta.

Ahora que sabes y tienes una idea más clara de lo que debes hacer y lo que no a la hora de tratar que tu marca o empresa se sume a este movimiento social, y no hacer una mala práctica como lo es el Pinkwashing, es hora de que, como sociedad, intentemos sumar más a este tipo de causas en lugar de restar y recordar que no les vamos a dar una voz, sino, que simplemente serviremos como plataforma de exposición para este tipo de movimientos y así llevar este mensaje más lejos y hacia esas personas, a las que de no ser posible por nuestra labor de apoyo, no les llegaría dicho mensaje. Y recuerda, di no al Pinkwashing.